Subasta Artcurial Mónaco 2020

En esta subasta celebrada el 23 de julio en el Hotel Hermitage de Montecarlo, Artcurial puso a la venta un total de 97 lotes, de los cuales 90 eran vehículos a motor. La recaudación total ascendió a 7.213.370 €, una buena cifra a pesar de que casi la mitad de los lotes no encontraron comprador. Artcurial siempre nos tiene acostumbrados a catálogos bastante variados y de gran calidad en sus ventas. En esta subasta llama la atención la casi ausencia de coches de preguerra, con solo tres unidades. De ellos dos quedaron sin vender. El único que encontró nuevo dueño fue un Bugatti tipo 57 Cabriolet de 1939 con carrocería por Vanvooren.

Este tipo 57, con el chasis Nº57780 fue uno de los últimos 5 de este tipo fabricados y también portador de la última carrocería de cuatro plazas cabriolet construida por Vanvooren sobre un chasis Bugatti. Un coche con una historia fascinante, ya que fue uno de los últimos cinco chasis fabricados en Molsheim y que luego tuvieron que ser trasladados a Burdeos cuando Francia fue ocupada por los nazis. Este lote fue ofrecido sin precio de reserva y tenía una estimación inicial entre 600.000 y 800.000 €, aunque el precio de venta final se quedó en 500.640 €.

Fotos © Peter Singhof cortesía de Artcurial

Como no todos los aficionados nos podemos permitir coches con precios que ronden o superen el medio millón, también es importante la presencia en estas ventas de clásicos más populares. Coches baratos pero de calidad. Aquí destacaríamos algunos ejemplos, como puede ser un Fiat 500 L de 1972. En este caso una unidad restaurada y en un muy buen estado por la que se pagaron 10.132 €.

Por un poco menos encontramos un Fiat 600 de 1956, de nuevo un coche restaurado y en perfecto estado de funcionamiento. Un coche de la primera serie, detalle que podemos observar por las ventanillas delanteras corredizas y las puertas suicidas, y que además es elegible para la Mille Miglia. Su precio fue de 9.536 €.

La versión cabriolet del Peugeot 404 fue uno de los diseños más logrados de Pininfarina para la marca francesa. El coche ofrecido pertenecía a la versión Super Luxe y equipaba el motor de inyección en su versión más potente, que generaba unos 96 cv aproximadamente. Esta unidad había sido sometida a una restauración que tuvo una duración de tres años y en la que se habían invertido más de 28.000 €. En esta ocasión el martillo bajó en 38.144 €.

Hubo un tiempo en que Lancia era una de las marcas más deseadas del panorama automovilístico. De aquellos años dorados nos quedan inolvidables automóviles como el Aurelia B20, uno de los GT más bonitos y exitosos de los años 50. En esta venta pudimos disfrutar de un ejemplo de la sexta y última serie del modelo. Equipado con un motor V6 de 2.5 litros y 112 cv de potencia, por este maravilloso coupé italiano se pagaron 116.816 €.

El Opel Manta 400 de grupo B es para mi gusto uno de los coches de rallye más espectaculares de su época. A nivel internacional no logró igualar los éxitos del Ascona, pero en los diferentes campeonatos nacionales si consiguió varias victorias. Hoy día es uno de los grupo B más asequibles que se pueden comprar. La unidad ofrecida aquí había pertenecido al piloto francés Hugues Delage, con el cual se había llevado alguna victoria en el campeonato nacional de rallyes de dicho país. Los 83.440 € pagados por esta unidad del año 1983 no son un precio muy alto para disfrutar de un vehículo de la época dorada de los rallyes.

Del Venturi 260 Atlantique se construyeron solo 25 unidades. Este deportivo francés de motor central pesaba tan solo 1.110 kg, lo que unido a un V6 de 2.8 litros y 260 cv de potencia garantizaban unas muy buenas prestaciones para su época. Por esta unidad del año 1993, el precio final fue de 57.216 €.

Nadie puede discutir que el Ferrari F40 es uno de los coches más icónicos de la marca de Maranello. En la gran mayoría de las subastas encontramos alguna unidad de este mítico automóvil. Los precios de este modelo se han mantenido estables en los últimos años, con cifras que rondan el millón de euros, aunque por algunas unidades se ha llegado a pagar algo más. Ya sabemos que la historia de un coche de colección juega un papel muy importante a la hora de valorar un automóvil de estas características. En esta ocasión vemos un coche del año 1990, que había sido vendido nuevo en España, y poco más de 30.000 km a sus espaldas y por el que se consiguió la cifra de 959.560 €.

Y si de coches icónicos hablamos el Mercedes-Benz 300 SL no le va a la zaga al F40. De nuevo estamos ante un modelo que no puede faltar en ninguna de las grandes subastas que se celebran en todo el mundo, ya sea en su versión coupé, el mítico alas de gaviota, o en la posterior versión abierta. En esta venta encontramos un coupé del año 1955 por el que se pagaron 1.416.000 €, una unidad que montaba desde su salida de fábrica las ruedas Rudge de tuerca central y el árbol de levas NSL. Esta pequeña modificación del motor proporcionaba 20 cv adicionales a los 215 cv del motor estándar.