Terminada la segunda guerra mundial surgieron por toda Europa un gran número de microcoches. En la mayoría de los casos eran poco más que motocicletas cubiertas por una carrocería que protegía a los ocupantes contra las inclemencias del tiempo. Gracias a sus motores de baja cilindrada estos vehículos se beneficiaban de una menor carga fiscal. Algo que los hacía muy atractivos para los maltrechos bolsillos de los ciudadanos europeos.
Robert Hannoyer era el propietario de un taller de reparación de automóviles en París. Un hombre con una gran imaginación, que viendo el éxito que estaban teniendo este tipo de coches, decidió construir uno por su cuenta. Durante tres años fue perfeccionando su proyecto en la parte trasera de la tienda de su mujer y fabricó dos prototipos en su taller. Una vez terminado le dio su nombre pero pronunciado al revés, Reyonnah. El coche contaba con un ingenioso sistema de ruedas delanteras retráctiles ideado para solucionar los problemas de estacionamiento.
Prototipo nº1
La carrocería del primer prototipo estaba fabricada en Duralinox y tenía un diseño inspirado en la aviación. El motor era un monocilíndrico de origen AMC con una capacidad de 175 cc. El primer automóvil terminado fue expuesto en el salón del automóvil de París de 1950. Aunque la potencia era de aproximadamente 9 cv, este primer prototipo fue empleado para establecer algunas marcas en eventos organizados por el ACF. Por ejemplo en el año 1952 en el autódromo de Montlhéry logró rodar durante 50 km a una velocidad media de 95 km/h, llegando a alcanzar los 100 km/h. Una velocidad más que respetable para un vehículo de tan solo 175 cc.
Hannoyer también inscribió su nueva creación en varios concursos de elegancia. A pesar de haber recibido una buena acogida en su presentación, en el momento de pasar a su producción en serie surgieron diferentes problemas que obligaron a detener la producción. Se cree que se construyeron unos 14 Reyonnah en total, incluyendo los dos prototipos. El primer prototipo ha sido subastado por Artcurial el pasado 18 de marzo por un precio de 83.440 €.
Prototipo nº2
El segundo prototipo fue registrado en el año 1953. Este fue el coche que participó en el concurso de elegancia de Enghien-les-Bains con la actriz Paulette Dubost. También fue expuesto en el salón de París de 1954. Monta el mismo motor de un cilindro y 175 cc del primer prototipo. Este coche fue propiedad de la familia Hannoyer hasta el año 2014. En esta fecha fue subastado por Artcurial alcanzando un precio de 125.160 €.
Modelo de serie
A pesar de la expectación que había creado este pequeño automóvil y que según Hannoyer había un gran número de pedidos, finalmente la financiación necesaria para la producción a gran escala nunca llegó. Según las fuentes apenas se fabricaron una docena de unidades. En el año 2013 uno de estos modelos de serie fue vendido por RM Sotheby´s por un precio de 184.000$. Esta unidad formaba parte de la colección de microcoches del museo Bruce Weiner en los Estados Unidos y había sido magníficamente restaurada.
