
La empresa AMG fue fundada en el año 1967 en la ciudad alemana de Affalterbach por Hans Werner Aufrecht (A) y Erhard Melcher (M). La G hace referencia al lugar de nacimiento de Aufrecht, la ciudad de Grossaspach. En el año 1971, y tomando como base un Mercedes 300 SEL 6.3, sorprenderían a todo el mundo logrando un segundo puesto en la clasificación general y una victoria en su clase en las 24 horas de Spa. El coche pilotado por los alemanes Hans Heyer y Clemens Schickentanz, sólo sería superado por el Ford Capri RS 2600 del también alemán Dieter Glemser, que acompañado del español Álex Soler-Roig se alzarían con el primer puesto, en la que sería la única victoria de un piloto español en dicha prueba. El pesado AMG se impondría, gracias a su fiabilidad, a los BMW 2800 CS y Alfa Romeo 2000 GTAm, mucho más ligeros y a priori más competitivos.

El motor V8 vio aumentada su capacidad de los 6.332 cc originales hasta 6.835 cc. Con nuevos árboles de levas reforzados, brazos de balancines, así como también nuevas bielas. La potencia aumentó hasta los 420 cv a 5.500 rpm y el par motor hasta los 608 Nm. El cambio automático original de cuatro relaciones fue sustituido por una caja manual ZF de 5 velocidades, la misma que montaban los Aston Martin de la época. Esta sería la encargada de trasladar la potencia a las ruedas traseras. Los neumáticos de competición en la medida 4.50/13.00 x 15 delante y 5.50/13.60 x 15 detrás y los frenos de disco en las cuatro ruedas completarían las mejoras en el chasis. La suspensión seguía siendo neumática, al igual que en el modelo de serie. El peso, aunque menor que en el 6.3, seguía siendo con 1.635 Kg demasiado elevado para un coche de carreras, lo que provocaba que los frenos acusaran problemas de fatiga y los neumáticos se desgastaran demasiado deprisa.

Era capaz de acelerar de 0 a 100 Km/h en 6,1 segundos, 12,6 seg hasta los 160 Km/h y los 200 Km/h en apenas 20 seg, todavía en tercera velocidad. En cuarta se alcanzaban los 241 Km/h y todavía quedaba una quinta, con la que teóricamente el coche alcanzaría los 282 Km/h a 6.000 rpm, aunque la velocidad máxima oficial se quedaría en 265 Km/h.
El segundo puesto en Spa fue el único resultado destacable del 300 SEL 6.8, también conocido con el sobrenombre de Der rote Sau (el cerdo rojo). Una vez finalizada su carrera deportiva, el coche fue vendido al grupo francés Matra, que buscaba un automóvil capaz de acelerar hasta los 200 Km/h en tan sólo 1.000 metros. Fue utilizado en el departamento de aviación militar, alargando el chasis cerca de un metro para poder introducir los diferentes equipos de medición necesarios en su nueva vida militar. Más tarde desapareció para siempre.
La unidad de las fotografias es una recontrucción realizada por la propia AMG , y se encuentra en el museo Mercedes en Stuttgart, Alemania.

Fotografías: Jose González.